La policía Utah persiguió a un automóvil por raras maniobras. Cuando el auto paró, para la sorpresa de la policía, era un nene de 7 años al volante que a penas llegaba a los pedales. El niño dice que se llevó el auto de la familia porque no quería ir a la iglesia.
Según una entrevista de hoy, cuando se fue la policía de la casa, el pedenx le dijo a sus padres que "sólo quería tener la experiencia de manejar un auto". El aprendió viendo a la mamá y a su hermana. Cuando escuchó la sirena de la policía persiguiéndole, fue corriendo a su casa (los padres pensaron que estaba arriba en su cuarto ya que era de mañana) y le dijo, papá: "la policía está en la puerta". El padre pensó que había pasado algo en la cuadra, pero no, para el asombro del padre, era para avisarle lo que había hecho su hijo.
Obvio que Preston terminó rezando en misa... y ahora no puede salir de su habitación por 4 días, ni ver tv, ni jugar con sus video games.
Via Today Show
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